lunes, 4 de agosto de 2014

Colada y plancha de cada día

A algunas mamás nos pasa que durante el verano en vez de estar de vacaciones estamos de "vacaciones". Entiéndase: que dejamos durante unos días el trabajo fuera de casa, que puede que con un poco de suerte nos vayamos a pasar unos días fuera de nuestra ciudad de residencia, que podemos estar más tiempo con los nuestros y ... que además si antes contábamos con una ayudita en las tareas de la casa nos encontramos que tenemos todas las tareas cargadas a nuestras espaldas.
Ya ha empezado agosto y me quedo sin las manos de los mayores de la casa para ayudar. Ellos han salido a sus campamentos, tan deseados, donde van a disfrutar de lo lindo... pero ¡me quedo sin manos que ayudan!
Ya les había enseñado a planchar, y ¡me quedo sin ayuda!
Cada casa tiene su pauta de trabajo "doméstico" para que ésta esté limpia y ordenada, con la ropa de colada y plancha al día.
Os cuento cómo me organizo para que el trabajo sea más liviano ya que somos 13 los que hacemos familia, y a diario hay al menos 4 camisas, 1 vestido de bebé, 8 polos y entre 8 y 10 pantalones-bermudas que lavar-planchar.
En cuanto a lavadoras, separo siempre ropa de color de la blanca. Repaso las prendas que tienen manchas con jabón de trozo antes de meter en la lavadora, me saca de quicio encontrarme con un lamparón cuando estoy terminando de planchar algo.


Cuando se ha hecho la colada tiendo la ropa lo más estirada que puedo, me ahorra tiempo de plancha. Las camisas y polos en perchas, del derecho y con el último botón - el del cuello - abrochado ( la prenda me queda más armada)


Para la plancha de polos (En verano es la prenda estrella junto con la camiseta y el bañador) empiezo por cuello, luego hombros - mangas y resto del cuerpo.



PLANCHAR UN POLO




  







No doblo sobre la marcha porque me parece que se me hace eterno este trabajo. Dispongo todos los polos o camisetas en el respaldo de una silla y al terminar y recoger tabla y plancha, me dedico a doblar.




Esto me permite dejar tarea a los niños, que saben doblar de maravilla los polos y ellos solitos los guardan en sus cajones.
Las camisas en cambio si las cuelgo en perchas según termino su plancha, prefiero no doblarlas para que no hagan arrugas. Claro que no siempre se dispone de espacio en el armario.

Pero sobre todo: "Si tus hijos van teniendo edad ¡ENSEÑALES! a planchar, te quitará un montón de trabajo. 

Yo tenía ayuda de primera línea y me voy a tener que poner a enseñar a los demás, ¡me he quedado sin manos que ayudan!

¡Cuanto les echo de menos!



No hay comentarios: